La evidencia de un sueño que se hace cada vez más grande
En 1958, en Quito, lejos de su país de origen, René Elie emprendió una aventura cuya trascendencia es hoy parte de la historia de esta ciudad. Cyrano abrió sus puertas con una oferta que iba más allá de la preparación de pan, pastas y pasteles. Fue desde su origen el lugar de encuentro de ciudadanos curiosos y golosos que encontraron aquí un espacio para compartir, para descubrir, para crecer.
Quienes hoy hacemos Cyrano, nos sumamos a esta aventura día tras día; una travesía que ha sido parte de los momentos más íntimos de las familias quiteñas desde hace 64 años. Quienes estamos aquí, nos sentimos honrados de seguir creando y descubriendo y viviendo junto a ustedes el poder de un encuentro cariñoso alrededor de la mesa familiar.
Para honrar nuestros primeros pasos, hemos desempolvado unas de las primeras recetas que Cyrano ofreció a sus clientes allá por los años 60. La Pasta Cardenal, el Merengue de Chocolate y el Merengue de Café, harán agua a la boca a quienes las recuerdan e inyectarán un toquecito de nostalgia retro a quienes las prueben por primera vez.
